La Heredera

29 de junio de 2006

Últimamente no tengo oportunidad de ver demasiado cine. Y cuanto menos cine veo más nostalgia siento por aquellas épocas en que a menudo me colaba en maravillosas historias ajenas. El otro día, mientras "nostalgiaba" me sorprendí a mi misma recordándome que quizás fue ella la que plantó la semillita de mi gusto por el séptimo arte. Recuerdo con un cariño inmenso todas aquellos viernes y sábados por la noche, cuando las tres nos entregábamos felices al ritual de repartirnos los asientos, apagar la luz y dejar que nos contaran una dulce historia en blanco y negro. Casi siempre eran historias de amor. Por aquel entonces mi generación era ingenua y cándida (y yo el doble que el resto) y amor y romanticismo entendido en el más tierno sentido de la palabra eran sinónimos.



Quizás por todo esto me acuerdo especialmente de "La Heredera". Esta película me impactó mucho. Recuerdo que me encantó, al mismo tiempo me sorprendió y con el paso del tiempo he descubierto que probablemente lanzó contra aquella inonencia dos nuevos inquietantes conceptos hasta entonces inimaginables para mí: traición y venganza.

No he vuelto a ver la película. He de reconocer que en estos casos siempre temo al redescubrimiento, porque nunca sé cómo resultará y el miedo a la decepción es demasiado grande. Necesito mantener mis mitos intactos. Es una gran película, seguro que no me parecería lo contrario ahora, de hecho creo que es de las mejores de William Wyler, pero supongo que esa sensación de descubrimiento no se volvería a repetir.

Algún día, cuando un viernes por la noche me siente en el salón con mi niña a ver películas en blanco y negro, seguro que veremos "La Heredera".

4 secretos:

Fede dijo...

No sé por qué, nunca he sido de ver mucho cine. No es que no me gusta, es sencillamente que no lo miro.
Pero hace cosa de dos meses tuve unos días de esos en los que uno no-se-puede levantar de la cama, en que nada tiene sentido... y un par de pelis me distrayeron. Eran malas, pero entretenidas y, aunque yo seguía pensando en mis desgracias, no lo hacía tanto.
Pero desde entonces miro una peli de vez en cuando. Mi baremo para saber si una peli es buena (si me gusta, es buena, la opinión de cada uno en estas cosas es la única válida) consiste en medir hasta qué punto logra hacerme olvidar mi vida.
No sé si meteré la pata con lo que voy a decir, si me diréis todos en estampida que he dicho una barbaridad, pero la última de Almodóvar, esa de Volver, me encantó. Y, realmente, cuando la vi era difícil hacerme olvidar mi vida. Y lo consiguió por completo. Además me divertí y lloré y todo :)
Qué bonito es encontrar cosas bonitas.

desconvencida dijo...

Yo la vi hace tantos años que no la recuerdo apenas, aunque hace menos he visto la nueva versión, que se llama "Washington square", pero Jennifer Jason Leigh no es comparable a Olivia de Havilland... Por cierto, que está basada en una novelita de Henry James que te recomiendo :)

Gala dijo...

Yo no puedo con William Wyler: lo he probado todo... Incluso Ben-hur (que tenía todas las de ganar: la carta, los mejores años de nuestra vida -o algo así-, la señora miniver, la loba (?)... no recuerdo si ésta última era de él, pero me da igual: es Bette Davis!!

Muchos besos!

Porsela dijo...

monsieur bleu, ese final no necesito volver a verlo, es lo que más recuerdo de la película... cómo olvidarlo, si es sencillamente genial. Ver esa escena es como ver a la propia venganza cobrando vida. Y mi niña querrá ver pelis en blanco y negro, porque saldrá rara, como su mamá. Por cierto, me alegra que vieras la peli, tantas veces que te hablé de ella...

Fede, a mí "Volver" también me encantó. Me parece que le has encontrado muy buen uso al cine y tu criterio para elegir pelis veo que de momento te funciona. Por cierto, creo que es en El Club de los Poetas Muertos que dicen: "leemos para sentir que no estamos solos", quizás en la lectura también puedas encontrar algo de compañía, aunque estoy segura que esto ya lo practicas.

Desconvencida, conozco la nueva peli, pero nunca he tenido la curiosidad de verla... estoy tan segura que será peor... y sería como traicionar a la "mía". Y desde luego, ver a "la buena" de "lo que el viento se llevó" disfrutando de esa manera mientras saborea su venganza no puede tener rival. El libro sí que me gustaría leérmelo algún día.

Elenita, tú y yo tenemos que hablar sobre esto... Por cierto, sí, La Loba es de él.